Mientras los años pasan nos formamos el habito de los resultados que tenemos en la vida, como el habito de no creer en una misma en diferentes aspectos de la vida, pero existen momentos catárticos que te hacen ver hacia atrás donde te das cuenta que la única cosa que te estaba poniendo el freno para no avanzar eran esos hábitos aprendidos de creer o mas bien no creer en ti.
Un claro ejemplo de este se me vino a la mente hace unos días que salí con mi amiga desde 1994 y fuimos a un karaoke a cantar cosa que a pesar de llevarnos mucho y conviví durante lo que se le puede llamar una vidas nunca habíamos hecho una frente a la otra, y aun así lo hicimos y los disfrutamos mucho, pero el punto de esto es que la memoria de ella impulsándome a cantar frente al chico que me gustaba en la preparatoria, ella creyendo en mi vino a la mente como balde de agua fría, por que ella creyó mas en mi en ese momento y solo existe el what if . . . , y no por que eso fuera a cambiar el destino de esa relación de adolescente con sujeto en cuestión , si no la relación conmigo misma y el habito hubiese sido modificado o mínimo diferido en ese momento para generar otro Branch en mi rumbo de vidia y quizá solo quizá me hubiese atrevido a mas cosas.
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